Existe una gran variedad diferentes de cerámicos, entre todas ellas se encuentra el gres. Todos estos, son de gran resistencia, y calidad, además de fácil limpieza y mantenimiento.
Consejos previos a la colocación:
Antes de todo, debes calcular la superficie que vas a cubrir, y un poco más para todos los detalles. Dicho suelo viene en baldosas de distintos tamaños. Luego, debes vaciar todo el ambiente que vas a cubrir y limpiar bien la superficie en donde se va a colocar el piso nuevo. En el caso de que haya polvo, debes quitarlo ya que las baldosas no se van adherir bien y con el correr del tiempo pueden comenzar a despegarse y quebrajarse. En el otro caso de que el suelo se encuentre desnivelado, debes aplicar pasta niveladora antes.
¿Cómo colocar el nuevo piso?
Habitualmente los suelos cerámicos o gres se colocan sobre otro. Debes retirar puertas y cepillarlas para que al colocarlas de nuevo, se puedan abrir y cerrar sin rozar el suelo nuevo. Con una escuadra y un metro, se coloca la primera baldosa en el centro y de ahí hacía los costados. Debes controlar el nivel de cada una de las baldosas, y presionar hasta que queden todas de la misma altura.
Al llegar a la orilla, debes tomar la medida con mucho cuidado para cortar del tamaño que se necesite. Por último, dejar que seque bien y después aplicar las juntas. No se recomienda pisar la superficie durante el tiempo de secado, ya que si el pegamento todavía no se secó, las baldosas se pueden quebrar y moverse.