La menta es una hierba vigorosa que puede crecer con facilidad en una maceta igual de bien que si es plantada en el suelo. Todos los tipos de menta incluyendo la menta dulce, y la menta verde, son de crecimiento rápido y se expanden con facilidad, por lo que deben darles un lugar amplio para difundirse sin meterse en el camino. También se pueden plantar en una maceta. La menta crece extendiéndose por encima y por debajo de la tierra, formando rápidamente parches verdes grandes y exuberantes. Ubicada en el lugar correcto llega a ser una cubierta de tierra bastante estacional. También puede contener menta en lugares estrechos, como lo es entre los adoquines de una pasarela donde sus pies puedan rozar las hojas para liberar su fragancia.
Siembra de la menta
El cultivo y la siembra de la menta en el interior es muy fácil de lograr. Usted puede sembrar la menta en el interior de su casa en una maceta con tierra o incluso en una botella de agua. Para empezar, se necesita un recipiente con un drenaje adecuado para el crecimiento saludable de las plantas. Además es importante que su planta de menta cuente con una buena mezcla de tierra, ya sea un tipo normal comercial o una con cantidades iguales de arena, turba y perlita mezclada.
El Agua después de la siembra es importante, así como también colocar la planta en una zona con luz indirecta, preferiblemente cerca de una ventana orientada al este durante la primavera y durante el verano con una orientación sur oeste. También se debe ubicar su planta de menta en una zona con una temperatura interior de alrededor de 18-21 C durante el día y de 13-15 C en la noche.
Si desea cultivar plantas de menta en agua, la manera mas simple es buscar esquejes de punta de alrededor de 5 a 6 pulgadas de largo de una planta de menta ya establecida. Luego se debe quitar las hojas inferiores y colocar los esquejes en un vaso lleno de agua o en una botella. Por ultimo debes colocar la botella o el vaso en una ventana soleada que tenga por lo menos de cuatro a seis horas de luz al día.
Cuidado de la menta para que crezca en el Interior
Para que la menta pueda crecer sin problemas en el interior de tu casa, hay un par de cosas necesarias que debes saber para su cuidado. Una cosa importante es el riego de la planta. Estas plantas prefieren mantenerse húmedas, pero tampoco es aconsejable el exceso de agua. Si la parte superior del suelo se vuelve seca al tacto, entonces se necesita riego. De lo contrario, trate de mantener uniformemente húmedo.
La luz solar también es importante. Para ello usted debe girar la planta cada tres o cuatro días más o menos para mantener una apariencia más uniforme de la misma, ya que las plantas tienden a inclinarse hacia la luz, convirtiéndose en una planta desequilibrada. Si lo desea, se puede mover la planta de menta al aire libre durante el mes de verano.
La fertilización no es un área importante en esta planta, pero puede darle una dosis ocasional de fertilizante soluble en agua o emulsión de pescado. Mezclar el fertilizante a media fuerza. No es aconsejable echar fertilizante de mas, ya que esto puede causar que la hierba pueda perder su sabor general.
Cosecha y el Almacenamiento de la menta
Se debe Recoger las hojas de menta de la planta cuando los necesite. La menta es fácil de cosechar. Sólo es necesario pellizcar las hojas en cualquier momento que los necesite. Para realizar una cosecha grande, esperar hasta justo antes de que la planta florezca, cuando el sabor es más intenso. A continuación, cortar toda la planta hasta justo por encima de la primera o segunda serie de hojas. En el proceso, se debe quitar las hojas inferiores que tengan una coloración amarillenta para promover el crecimiento de plantas más tupidas.
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