La espinaca pertenece a la familia de las quenopodiáceas y es una planta originaria de Asia central. Ingreso a Europa en siglo XI, cuando los árabes la introdujeron en la península Ibérica, y recién en los siglos XV XVI se expandió a Holanda, a Inglaterra y el resto del viejo continente. En la actualidad la espinaca es un cultivo muy extendido en todo el mundo.
La espinaca es una planta anual que tiene rápido crecimiento y es de clima templado. Las hojas son de color verde y pueden llegar a tener diferentes formas. Pueden ser grandes o mas pequeñas, lisas o rizadas. Las flores pueden surgir a partir de los tallos laterales de las hojas y son de color verde. La siembra de espinacas de verano se hace en primavera, y la espinaca de invierno se siembra entre fines del verano a mediados del invierno.
Materiales necesarios para hacer una huerta de Espinacas
- Semillas de espinacas
- Recipiente germinador
- Tierra fértil
- Arena
- Rociador
- Agua
Procedimiento para hacer una huerta de Espinacas
El primer paso es la germinación. Para ello llene el recipiente germinador con tierra fértil mezclada con un poco de arena. La espinaca necesita un buen drenaje y un suelo suelto, por lo que conviene mover la tierra antes de la siembra. Coloque las semillas, cúbralas y riegue con cuidado para no encharcar. Si tiene lugar, se recomienda la siembra directa en el jardín, en hoyos cada 5 cm y en líneas separadas a 20 cm. Después de las dos semanas vera sus retoños. Si desea una producción escalonada de espinacas, realice siembras periódicas cada 20 días.
El segundo paso es el trasplante de la planta. Este se realiza cuando las plantitas tienen 4 o 5 hojas. Riegue bien la maceta antes de retirarlas. Al hacerlo, cuide que no se desprenda la tierra de las raíces., y utilice Una cuchara que puede ser muy útil en este proceso. Haga un hoyo en el huerto o en una maceta de por lo menos 30 cm de profundidad y coloque una a una las plantas. Apriete con cuidado para que quede firme y riegue suavemente. Regar con frecuencia favorece el desarrollo de hojas tiernas y carnosas.
El tercer paso es proceso de crecimiento de la planta. La espinaca crece muy bien en sombra y con hojas bajas temperaturas, por eso es un cultivo ideal para la huerta de otoño. En la primera etapa de crecimiento, luego del trasplante, conviene cubrir la tierra con paja o viruta para protegerla del sol y de los golpes del agua al regar. Son aconsejables los riegos con biofertilizantes. Al cosechar, las hojas pueden cortarse con las manos sin necesidad de usar tijeras y con cuidado de no arrancar el resto de la planta de la planta.
Datos generales a cerca del cultivo de espinacas
Abono: conviene administrar el estiércol al suelo en el cultivo precedente. Poner abundantes y ricos fertilizantes.
Riego: el cultivo de espinacas necesita frecuente agua pero es importante cuidar el exceso.
Luz: cuando los días se alargan y la temperatura sube, las plantas dejan la etapa de roseta y comienzan a elevarse con tallos y flores.
Temperatura: las espinacas responden mejor en los climas de 10 a 15 grados. Con temperaturas mayores a 26 grados se inhibe la germinación.
Poda: deben cortarse los tallos a 3 cm del suelo para que vuelva a brotar.
Sustrato: la espinaca es una planta exigente. Lo recomendable son suelos profundos, bien drenados, fértiles, ricos en materia orgánica y nitrógeno.
Recolección: la recolección de espinacas se realiza entre 50 y 70 días posteriores a la siembra. Es importante no cosechar enseguida del riego porque la hoja se puede quebrar.
No olvides dejar tu comentario…
